Algo nuevo cada día

Desde pequeño me ha llamado la atención cómo siempre las hormigas están en movimiento. Ya sea en fila, cargando un terrón de azúcar o encontrando alguna manera de obtener alimento dentro de nuestros hogares. Lo curioso es que es muy raro encontrar una hormiga que no sea mueva, que no esté avanzando. Proverbios 6:6-8 dice lo siguiente:

“Aprende una lección de las hormigas. ¡Aprende de lo que hacen y hazte sabio! A pesar de que no tienen príncipe ni gobernador ni líder que las haga trabajar, se esfuerzan todo el verano, juntando alimento para el invierno” Siempre tenemos que estar en movimiento, pensando de qué manera podemos invertir nuestro tiempo para poder crecer y no estancarnos por el conformismo de las cosas que ya hemos logrado. A Dios le interesa que siempre nos reinventarnos, que siempre estemos intentando hacer cosas nuevas, siendo proactivos en nuestra propia vida y también en el servicio a él. Dios ama el movimiento y ama que nosotros podamos siempre estar intentando cosas nuevas, en especial cuando se trata de pensamientos e ideas que benefician a su Reino. Te desafío el día de hoy a que puedas ser como las hormigas, que aunque no tengas a nadie encima de ti forzándote a hacer cosas nuevas con tu vida, puedas el día de hoy tomar la decisión de hacer algo más. De caminar esa milla extra, de hablar de Jesús con la persona que quizás nunca hablarías, de atreverte a ser como las hormigas. ¡Haz algo que quizás no hayas hecho antes, algo nuevo! Dios quiere que seamos personas creativas y siempre dispuestas a renovarnos, y así comprobar que somos diligentes y siempre con el deseo de ir creciendo. ¡Bendiciones y un gran abrazo!