top of page

Vista completa

¿Fallamos?


"Dice, pues, el Señor: Porque este pueblo se acerca a mí con su boca, y con sus labios me honra, pero su corazón está lejos de mí, y su temor de mí no es más que un mandamiento de hombres que les ha sido enseñado;[...]"

Isaías 29:13

Estando cegados en el pecado y la desobediencia no tenemos temor de Dios y no correspondemos a su amor; solo nos acercamos a Él buscando obtener algo a cambio, buscando nuestro propio beneficio, cantamos y decimos con nuestra boca que Él lo es todo pero apenas damos la vuelta ya le estamos fallando. Somos personas infieles, no somos leales al amor que Dios nos tiene. Fallamos a las personas que nos rodean, y a diario nos fallamos a nosotros mismos, engañándonos creyendo que somos capaces de lograr las cosas lejos de Él y que la vida que llevamos es suficientemente buena, mientras que a puertas cerradas sabemos que no es así, y el temor que profesamos tener hacia Dios no es más que un mandamiento de hombres. Finalmente nuestro temor es más un miedo al qué dirán las personas. Si yo peco, es más el temor a los hombres que al Dios mismo, e intentamos cuidar nuestra apariencia y nuestra reputación para no dar de qué hablar, no obstante sabemos que para Dios no hay nada oculto y no obedecemos a quien de verdad debemos de obedecer y honrar de corazón y verdad. Que nuestro único deseo sea honrar a Dios de corazón; que las apariencias se derrumben ante la manifestación del Único que merece toda la gloria. No pongamos más murallas y demos espacio al Espíritu Santo de Dios. Que Él trabaje en nuestras vidas y nuestra familia, y que nuestro temor a Dios sea real y verdadero y no sea sólo un mandamiento de hombres. Busquemos en todo tiempo su presencia, siendo valientes y decididos a seguir fieles a Dios hasta el final. ¡Bendiciones!


bottom of page